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La Loca Juana Bar de Vinos pretende acercar al público el mundo del vino de una manera jovial e innovadora. Un modelo de restauración donde la identidad de la marca es el vino y la tapa de cortesía, con productos de primera calidad, que desembocan en un remake del concepto de taberna tradicional".
Una vez conocidas sus ventajas competitivas, la enseña profundiza en su modelo de negocio. "Proponemos un concepto testado, en el que priorizamos la rentabilidad del franquiciado. Por otro lado, el equipo directivo que compone la empresa cuenta con experiencia en modelos similares de éxito, con un cómputo de más de 50 años en el mundo de la franquicia".
Para articular su expansión, la enseña busca a asociados con perfiles inversores, de autoempleo o que estén buscando transformar conceptos ya operativos.
"En función del perfil del asociado, podemos llegar a financiar el 50% de la inversión con entidades financieras que avalan el proyecto. El pay-back, mientras se estima entre uno y un año y medio".
Para finalizar con el retrato de esta marca, nos centramos en el apoyo de la central a los emprendedores, "que se traduce en un respaldo integral en los ámbitos de la formación, la comunicación y el marketing".
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